Al internarnos en un portal de magia y misterio se despiertan inquietudes dentro de nuestro ser, el alma es la única que puede reconocer de forma implícita lo que nos ocurre abriendo puertas de dimensiones inimaginables. Por tanto debemos saber que dentro de nosotros mismos existe cierta dualidad con la que debemos luchar cada día de nuestro andar generando alrededor de nuestro espíritu una fuerza que nos permita crearnos y recrearnos.

martes, 16 de agosto de 2011

CUARZOS...


¿Cómo Funcionan los Cristales?

En la antigüedad, el uso de cristales se le consideraba como prácticas de las antiguas culturas egipcias, fenicios, celtas e indios chamanes entre otros.

Sin embargo, hoy en día la ciencia está comprobando la utilidad y funcionamiento de los cristales como transmisores y receptores muy precisos y exactos, de hecho se utilizan en aparatos sofisticados de electrónica, satélites, naves espaciales, y muchos más.

Al utilizar cristales para curación, se trabaja con los sistemas que alimentan los niveles celulares o moleculares del cuerpo humano.

Los cuarzos tienen efectos poderosos para corregir los patrones de energía normal que pueden ser la causa de molestias o enfermedades. Mientras que se administra un medicamento o cirugía para arreglar el padecimiento en el cuerpo físico, los cristales trabajan con las energías sutiles o etéricas movilizando la energía estancada, al mismo tiempo que estabiliza los niveles de conciencia, por lo que se está efectuando curación con energía pura.

Los cristales de cuarzo actúan como transformadores y amplificadores de energía, equilibrando y re-energizando los sistemas biológicos desde su nivel celular, por medio de vibraciones oscilantes.

El cuerpo humano tiene la capacidad de regenerarse a sí mismo, esto tan simple como suena, se puede observar al restablecerse un hueso de una fractura, o al cerrar una herida.

Aquí es donde es muy importante estar conscientes de las formas de pensamiento que están ligados directamente a las emociones, por lo cual es posible armonizar los estados emocionales o mentales, y liberar las formas de pensamiento negativas acumuladas.

El cuerpo humano es un mecanismo completo, es toda una maquinaria sofisticada, la cual desde el punto de vista de la medicina se ve como un grupo de órganos, sistemas, red de nervios, vasos sanguíneos, músculos, piel y huesos.

Pero en realidad, el cuerpo físico es un campo de energía especializado, en equilibrio dinámico con sistemas superiores de energía que lo alimentan a nivel celular.

Esta alimentación se recibe a través de los meridianos y puntos de acupuntura que corren a través del cuerpo, suministrándole el fluido de energía que requiere cada órgano. Asimismo, corrientes eléctricas fluyen a través de los conductos, las cuales asisten en los fenómenos como cicatrización de una herida, el crecimiento y la reparación interna en general.

A esta energía vital, los Chinos la llaman "Chi”, los Hindús le denominan "Prana".

También existen otros cuerpos sutiles, que hoy en día ya se pueden observar a través de aparatos especiales, como las cámaras Kirlian, que permiten ver claramente las diferentes capas de luz de color o energía que rodean al cuerpo humano, tales como el cuerpo Emocional, el cuerpo Mental, el Cuerpo Espiritual.

El ser humano no es solo un cuerpo, o un órgano o una mente. Debe ser tratado como un ser completo, holísticamente (viene del griego "holos" que quiere decir "todo")

Se ha llegado a la conclusión de que la mayoría de las enfermedades son psicosomáticas, ya que comienzan desde un desajuste en la mente, como puede ser inferioridad, culpabilidad, etc., un desajuste en las emociones, como puede ser rencor, odio, etc., y finalmente afectan el cuerpo físico comenzando por un breve molestia, después dolor constante, y si persiste el desequilibrio, se convierte en un padecimiento o enfermedad.

NOTITA: Somos totalmente responsables de lo que sucede dentro y fuera de nosotros, ya que todos los patrones de pensamiento afectan y movilizan energías. Al utilizar cuarzos para curación, se está induciendo estabilización, equilibrio, fortalecimiento del sistema inmunológico, estimulando al cuerpo para que se regenere a sí mismo, logrando un total balance dentro y fuera de nuestra energía y por ende de nuestra vida.